El cuidado de la estética es un compromiso que adquirimos cada uno de nosotros con nuestra propia salud mental. Así es: mientras muchos piensan que implicarse en la belleza personal es una cuestión de vanidad, la realidad es que esto repercute de forma directa en la autoestima. Sabiendo esto, es fundamental conocer los mejores tratamientos disponibles en el mercado actual, bien sean cosméticos, técnicas innovadoras en centros de estética o los recursos asociados a la odontología. Existen diversas maneras de velar por la apariencia física y se antoja crucial indagar en el sector para encontrar las más efectivas.

Cosméticos para tu día a día

La cosmetología, al igual que sucede con cualquier otra ciencia, ha dado pasos de gigante a lo largo de las últimas décadas. Mientras que en un principio muchos de los productos eran de dudosa calidad, ahora disponemos de artículos con gran efectividad. Un ejemplo de ello lo encontramos en el contorno de ojos hidratante: una crema que nos devuelve la juventud al rostro.

Los contornos de ojos regenerativos de última generación están elaborados a base de activos naturales de primer nivel. Estos compuestos buscan la intensidad en el tratamiento, siendo idóneos para utilizarse en el día a día. Es decir, lo aplicamos cada noche o cada mañana para que haga el efecto deseado, sin la necesidad de acudir a clínicas y someternos a procedimientos invasivos.

El objetivo principal de este cosmético es aportar vitalidad y luminosidad a la zona de los ojos, revitalizando así nuestra mirada. Los efectos los podemos apreciar al poco tiempo de su uso, teniendo así un aspecto más joven, sin bolsas ni ojeras y con elasticidad. A su vez, evitan que la pigmentación del rostro sea desigual, manteniéndolo hidratado en todo momento.

Nuevos tratamientos en los centros de belleza

Mientras que los cosméticos están creados para nuestra rutina, los tratamientos especializados en estética de los centros de belleza tienen una connotación más esporádica. Siguiendo en la zona de los ojos, el lifting de pestañas es uno de los servicios más interesantes en dichas empresas; sirviendo de igual forma para revitalizar la mirada.

Esta técnica trata directamente la raíz de la pestaña para alargarla, corregir su curvatura, aportar espesor y, en definitiva, mejorar la expresión en conjunto. A diferencia de otros medios, el lifting no daña las pestañas en lo más mínimo y, tras someternos a este procedimiento, los tiempos de maquillaje se reducen de manera drástica.

En tan solo 25 minutos habremos concluido con la sesión, disfrutando de unos resultados que duran en torno a un mes. Asimismo, cabe comentar que el lifting de pestañas se puede combinar con otros tratamientos como su tinte, haciendo que la mirada sea más intensa todavía. Una auténtica innovación en el sector que nos ayuda a dar siempre lo mejor de nosotras mismas, haciendo que salir a la calle sea una experiencia de lo más embriagadora día tras día.

Sonríe sin complejos con el invisalign

Ahora bien, si hablamos de tratamientos permanentes, entonces toca centrarse en aquellos de los que disfrutamos en las mejores clínicas dentales. Entre todos los servicios que conforman la odontología, la ortodoncia invisible se ha radicado como uno de los que más demanda tienen cada año. El invisalign nos permite corregir la sonrisa para siempre y así gozar de una propuesta estética sin igual.

En lugar de llevar Brackets metálicos, empleamos unas fundas transparentes que poco a poco van colocando cada diente en su lugar. Todo el tratamiento es imperceptible y, puesto que se pueden quitar dichas férulas a voluntad del paciente, también presenta una comodidad sin precedentes. Eso sí, no debemos abusar de esta facultad, puesto que de lo contrario tardamos mucho más de lo previsto en alinear la dentadura.

Estamos ante un antes y un después en el campo de la odontología y cada vez más personas se suman a este fenómeno asistencial. Una hermosa sonrisa es un atributo destacado en materia de belleza y, dado que el invisalign ya es accesible económicamente, carece de sentido seguir sufriendo complejos cuando mostramos los dientes.