Hay momentos en la vida en los que toda la atención se enfoca a un solo evento, como el día de nuestra boda. Conviene seguir una serie de consejos, que aunque son bastante sencillos, tienen mucha utilidad para evitar colapsar. Hoy queremos darte algunos de ellos para que todo salga como deseas sin angustiarte de más.
La organización de la boda es una tarea que corresponde principalmente a los novios, aunque tengan a su familia apoyando y realicen la contratación de un organizador. Por esta razón se debe tener todo bien anotado, para evitar que cualquier olvido haga estragos en un día tan especial.
Si ya se ha decidido el lugar en el cual vivirán después de casarse, será mejor contratar una empresa de mudanza al menos 15 días antes y dejarlo todo bien ordenado en la nueva casa. Así se evitarán preocupaciones que tengan que ver al respecto de esto y disfrutarán su fiesta a sabiendas que su nido de amor espera para después de la celebración.
Cuando se tiene planificado salir de luna de miel, se deberá comprobar también que toda la seguridad de la nueva vivienda funciona correctamente. Esto evitará inconvenientes y molestias durante esos días en que ambos desean ser tan felices.
En torno a esto se pueden realizar los cambios previos que sean necesarios. Como colocar una cerradura menos vulnerable, ya que es algo que quitará poco tiempo con el apoyo de alguno de los cerrajeros de alicante y que es una labor que puede encomendarse a algún familiar cercano, como un padre o hermano.
Además, existen otras cosas que no podrán dejar en manos de terceras personas y que están directamente vinculadas al gran día, así que toma nota para que no pases por alto ningún detalle.
Las revisiones finales
Cuando falta alrededor de una semana para la boda, parece que el reloj se burla de ti por la rapidez que pasan las horas. Pero, realmente es que puedes considerar que existen tantas cosas en la lista que te hace falta solventar que el tiempo se queda muy justo.
El primer paso será controlar que todos los servicios contratados estén en orden con las instrucciones dadas. Una visita a la agencia de decoración te permitirá conocer que algunos elementos como los arreglos florales, centros de mesa, luces, adornos, etc., que vayas a colocar tengan ya las bases listas y solo les falte lo natural que sí deberá ser colocado el mismo día o uno anterior.
También habrá que comprobar con el servicio de catering todos detalles como los aperitivos, la comida, bebidas, la tarta, etc. Esto te dará tranquilidad en ese aspecto pues son empresas que se dedican a este trabajo y ya están capacitadas para organizar todo sin mayores contratiempos.
Para mayor calma, se pueden revisar uno a uno los aspectos de los que se ha tomado nota en la agenda de bodas. Si se tiene contratado el servicio de un planificador, lo mejor será hacerlo en su compañía, sino, con las personas que estén directamente involucradas en la organización, como los familiares y amigos más cercanos.
El gran día
Ya llegado el día siempre quedan muchas dudas con respecto a toda la organización y, sobre todo las novias, suelen desear que la fecha esté un poco más lejana, pero aunque la cambien, siempre será lo mismo.
Para evitar un exceso de nerviosismo, puede resultar conveniente antes de ir a arreglarse, darse un paseo por el sitio de la recepción para observar cómo va marchando todo y si está quedando tal y como lo habían soñado.
Incluso los novios pueden aprovechar para dar un paseo a solas por todo el lugar y enterarse bien de lo que está sucediendo, pues su día llegó. Este sencillo momento de relajación, viendo las flores, las mesas, las sillas de diseño que escogieron, el altar, etc. Puede dejar un mensaje en el subconsciente de que el gran día está aquí y que todo saldrá perfecto porque tienen lo más importante: el amor que los une.
