Disentir, debatir y llegar a puntos de encuentro es el mayor acto de democracia. Convencer a quien disiente, con argumentos, e incluir a la mayor parte de ideas en un mismo objetivo debía de ser la labor de los que dirigen cualquier proyecto, y no atacar, insultar o difamar con el objetivo de destruir a quien tenga una postura crítica.Todo lo expuesto debería de ser una seña de identidad en Podemos, pero nos encontramos de forma repetitiva con que esto no se lleva a cabo, no se hizo en la época de Breogan Riobo, y tampoco se hace en la actualidad, no se aprendió de los errores. Frases como "hubo que intervenir porque estaba en juego la democracia" deberían de no exigir en este partido donde presumimos de demócratas y luego carguitos nombrados a dedo pretenden dar lecciones de democracia a quienes buscan él bienestar común, el crecimiento y fortalecimiento de nuestro partido desde la crítica a lo mal realizado, y desde la propuesta de cómo hacerlo mejor....ambas desechadas por quienes se otorgan a sí mismos capacidades que no tienen, interpretan estatutos su antojo, y trabajan dentro del partido de una forma totalmente sectaria e indecente para cualquier demócrata. ....(+)
