El 48% considera el diseño web como factor decisivo a la hora de valorar si una empresa es de confianza.
El uso creciente de los móviles como principal medio de acceso a Internet hace indispensable la inversión en un diseño adaptable a estos dispositivos.
Cuando hablamos de la imagen de una empresa está claro que no solo nos referimos a los aspectos visuales que se perciben de ella. Sin embargo, estos son una parte muy importante de la misma, ya que un primer vistazo a un logo, anuncio o al diseño web de una página, contiene una gran cantidad de información que tan solo necesita de unas milésimas de segundo para ser captada por el espectador.
Por tanto, la apariencia de todo aquel elemento vinculado a su marca define la primera impresión que tendrá cualquier persona de un negocio, y esto supone que en muchos casos esto será lo que determine la rápida y casi inconsciente decisión de descartar o buscar saber más sobre la empresa.
Conocer cuales son exactamente las teclas que se deben tocar para causar en el consumidor la impresión deseada no es una tarea sencilla, y no en vano hay toda una técnica detrás que se ha ido perfeccionando a lo largo del tiempo, a través de ensayos y errores, estudios de mercado y el uso de muchas otras disciplinas. Por ello, lo más común es que una empresa que desee cuidar este aspecto recurra a un buen estudio de diseño gráfico, ya que supone una de las inversiones más rentables a la hora de generar una imagen de marca sólida y competitiva.
La importancia del diseño web
En la actualidad la presencia online es una necesidad para toda empresa, especialmente para aquellas que empiezan y buscan hacerse un lugar en el mercado.
Las redes sociales son una gran herramienta, pero en la mayoría de los casos encargar la creación de un sitio web propio a una buena agencia de diseño web puede marcar la diferencia en cuanto a la captación de clientes.
El diseño de la página no es una cuestión menor, ya que según estadísticas recientes el 48% de los usuarios valora el diseño web como principal factor a la hora de determinar la credibilidad de un negocio. Un buen diseño no consiste únicamente en una apariencia atractiva, también está implicado en el rendimiento y la velocidad de carga de la página, la usabilidad y su adaptación a los principales navegadores y dispositivos desde los que se accede a ella.
Diseño web responsive
Actualmente el 92% de los usuarios utiliza el móvil para conectarse a Internet y más del 72% prefiere sitios webs adaptados a estos dispositivos. Además, los buscadores como Google tienen muy en cuenta el hecho de que un sitio web tenga una versión adaptada a móviles y tablets, de tal forma que su ausencia implica una penalización en el posicionamiento en los resultados de búsqueda.
Este tipo de diseño adaptable es conocido como diseño responsive, y no solo aumenta la visibilidad del sitio en las búsquedas que realicen los potenciales clientes, si no que además mejora considerablemente la experiencia de estos, facilitando que se decidan a compartir el contenido, contacten con la empresa o soliciten los servicios o productos ofrecidos desde la propia página.
Por tanto, es evidente que la ausencia de un diseño adaptable a los diferentes dispositivos se traduce en una considerable pérdida de ventas; algo que ningún negocio se puede permitir, pero que se convierte en un problema especialmente sangrante si este está dando sus primeros pasos en el mercado.
¿Cuándo recurrir a profesionales?
Si se trata de un proyecto empresarial serio, la respuesta es siempre.
El trabajo de diseño, como hemos visto, va más allá de cuatro arreglos hechos por manos inexpertas. Detrás de un logo, de una web o del diseño de un embalaje, hay un gran trabajo y muchas horas de formación invertidas que no pueden sustituirse con imágenes libres de derechos y un montaje hecho en cualquier editor online.
Un estudio de diseño gráfico cuenta con profesionales creativos de diversas ramas, especializados en marketing y comunicación audiovisual, que desarrollan estrategias especialmente ideadas para cada cliente. Por tanto, si bien el uso experimental de estas herramientas web es verdaderamente útil para proyectos personales de ocio, pequeñas presentaciones o usos más informales, no es adecuado cuando lo que está en juego es el futuro de una empresa que no se puede permitir perder el tiempo con experimentos.
Recurrir a un estudio de diseño gráfico y web para reforzar la marca y optimizar el sitio web de la empresa es una inversión necesaria que conviene hacer desde el principio.