Vigo, 23 de mayo de 2024. Invertir en instalaciones eólicas en Rumanía con una interesante rentabilidad. Éste era el negocio que le plantearon a varios ciudadanos gallegos que llegaron a invertir individualmente hasta un millón de euros que no han conseguido recuperar por resultar el negocio una auténtica estafa.

Después del boom de las renovables en España, la inversión en el crecimiento del sector energético eólico en Rumanía parecía una alternativa completamente lógica. Así lo creyeron una serie de gallegos que aceptaron invertir en plantas eólicas que, sin embargo, resultaron ser un negocio fraudulento

En el ruinoso negocio en Rumanía cayeron muchos ciudadanos gallegos, aunque tan sólo dos han denunciado la situación a través de BGI-LAW. Como destaca Juan Camacho, uno de los socios del despacho, serían muchos los gallegos afectados por este negocio fraudulento, “que pueden y tienen que denunciar la situación porque la propuesta de inversión que se les hizo fue totalmente fraudulenta y las consecuencias pueden seguir pagándolas a día de hoy, cómo le ha pasado a los clientes que actualmente estamos representando”.

Efectivamente, además de perder la inversión realizada, los inductores del fraude convertían a los inversores en administradores y responsables de las empresas mixtas creadas ad hoc para la canalización de las inversiones en Rumanía, por lo que, la Agencia Tributaria española por orden de la Agencia de recaudación en Rumania les exige ahora, además, el pago de responsabilidades económicas por derivación de responsabilidad en el proceso de quiebra de estas empresas mixtas en relación a la tributación. Por lo tanto, además de perder el dinero que invirtieron, los afectados se vieron afectados por embargos y trabas de la Agencia Tributaria española al tener que asumir las responsabilidades inherentes a la gestión fraudulenta de las empresas en Rumanía, sin ser administradores reales de las sociedades.