Las galgas suelen ser esa herramienta que vemos llevar aún mecánico o ingeniero, y que generalmente nos genera una gran curiosidad. Básicamente, no cumplen otra función que proporcionar un dato específico sobre la separación existente entre dos materiales. Su funcionalidad puede tener diferentes finalidades, y a lo largo de este artículo hablaremos sobre galgas, su importancia y como es el uso correcto de este dispositivo.
Existen situaciones en las que la separación es tan mínima, que el ojo humano no es capaz de determinar con exactitud la dimensión existente. Para poder compensar esto, se requiere de galgas de precisión. A continuación, conocerás los aspectos más relevantes de esta herramienta.
Qué función tienen las galgas de precisión
Dependiendo del oficio, las galgas permiten conocer si la separación entre dos objetos, que están muy cercanos, se encuentra dentro de los márgenes de tolerancia. Su uso en la mecánica automotriz le garantiza al profesional que la separación entre la punta de la bujía y el diodo es la correcta.
Otro ejemplo de su aplicación, radica en la evaluación de la distancia entre las válvulas, los pistones, o incluso, en los cojinetes del motor, para evidenciar si existe una holgura entre estos elementos, lo que permitirá hacer correcciones a tiempo y evitar que se generen daños más graves.
A modo de resumen, podemos decir que una galga de espesor se encuentra entre los instrumentos manuales de medición que aportan datos precisos de pequeña escala. Contar con la funcionalidad que es capaz de proveer, permite a los usuarios verificar las cotas de tolerancia que puede existir entre dos piezas.
Por ejemplo, en la calibración de una guitarra, también suelen ser utilizadas las galgas, ya que, cuando se busca que la distancia entre las cuerdas y los trastes sean tan cerradas como sea posible, sin generar ruido, se puede utilizar una de las láminas de precisión, para determinar qué distancia existe y si realmente existe una distancia tolerable.
Beneficios de usar galgas
Tal y como su nombre lo indica, las galgas de precisión proveen datos precisos acerca de medidas muy pequeñas que no pueden ser tomadas con otros objetos manuales. Por lo general, las medidas que suelen ofrecer están por debajo de 1 milímetro.
Estas distancias pueden parecer poco relevantes en algunos escenarios, sin embargo, un rango superior de separación entre dos piezas de un motor, pueden generar fugas de fluidos y daños muy graves, por lo que, la verificación que se suele hacer con las galgas, garantiza que todo se encuentra dentro de la tolerancia correcta.
La mayoría de las galgas se presentan en un juego de múltiples láminas elaboradas con acero templado, lo que les permite mantener su forma sin doblarse. Sin embargo, a pesar de que el material más popular empleado es el acero, algunos fabricantes han conseguido elaborar galgas de cerámica de zirconio.
Cómo se usa un calibrador de espesores
El uso de este instrumento es bastante simple, ya que, sólo se requiere de elegir una de las láminas e intentar hacer que esta atraviese el espacio que intentamos medir. La lámina más delgada suele identificarse como “No Pasa”, es decir, que no existe espacio alguno entre las dos piezas. Estaremos en presencia de la medida correcta cuando la galga entre perfectamente en el espacio sin quedar suelta o entrar con esfuerzo.
Su mantenimiento es indispensable, así que, mantén las láminas limpias y no deben ser utilizadas para otra función más que para la medición de espesor. Pueden dañarse con facilidad si no se manipulan correctamente, por lo que, se recomienda usarlas con precaución.
Las galgas de precisión se ubican entre los instrumentos indispensables para quienes requieren de medidas exactas en tolerancias mínimas. Estamos seguros de que puedes conseguir resultados más favorables incorporando esta herramienta en tu arsenal, pues permite hacer verificaciones más exactas.