En la actualidad, hablar de Internet significa hablar de cuestiones como las páginas web, las tiendas online o los servicios de correo electrónico. Al fin y al cabo, una de las características de la red es precisamente la facilidad que tenemos a la hora de comunicarnos. Una comunicación que viene precisamente de la mano del correo electrónico, entre otras opciones.

Solo hace falta pensar en la importancia que han tenido las cartas escritas a lo largo de la historia de la humanidad para darnos cuenta que Internet no podría haber llegado a ser tan importante como es hoy en día de no haber contado con la posibilidad de continuar con esta práctica. Tanto si se trata de correos personales como si son e-mails profesionales, cualquier usuario de Internet que se precie tiene una cuenta de correo electrónico.

Sin embargo, y a pesar de la gran oferta de servicios de e-mail que tenemos a nuestra disposición, cuando se trata de elegir la opción que nos dé justo lo que estamos buscando, que nos ofrezca todo lo que necesitamos, no todo vale.

Mucho más que una cuenta de correo electrónico: toda una experiencia como usuarios

De hecho, si tenemos en cuenta lo anterior, estaremos un paso más cerca de entender la buena acogida que ha tenido desde el principio Hotmail. Y también comprenderemos por qué a día de hoy sigue siendo la opción más elegida entre los usuarios, independientemente de las nuevas propuestas que aparecen cada cierto tiempo.

En ese sentido, los puntos por los que destaca Hotmail como proveedor de servicios de correo electrónico son los siguientes:

• Facilidad para abrir o acceder a una cuenta: la facilidad de uso es uno de los requisitos por los que se rige la red. Si algo no es fácil de usar, o si nos lleva demasiado tiempo, estará abocado al fracaso. Internet tiene que hacernos la vida más sencilla y lo que triunfa en la red es precisamente por ese motivo, como es el caso de Hotmail.

• Una página principal completa e intuitiva: relacionado con el punto anterior, es importante que la página de inicio tenga toda la información que necesitamos para comenzar. En especial a la hora de iniciar sesión en nuestra cuenta, tal y como podemos ver en la Hotmail Login Page. Una página desde la cual podremos acceder a nuestra bandeja de entrada para comenzar a utilizar nuestro correo electrónico.

• La posibilidad de personalizar nuestra cuenta: una opción que muchas veces solo está disponible en los servicios de correo electrónico de pago y que, sin embargo, con Hotmail podremos disfrutar desde el primer momento. Organizar los mensajes que recibimos en diferentes carpetas, crear respuestas automáticas, cambiar la foto de nuestro perfil, etc. son cuestiones que no solo nos permitirán elegir las características que buscamos en nuestra cuenta de correo sino que nos dejarán la sensación de tener un servicio hecho al 100 % para nosotros. Al fin y al cabo, el usuario tiene que encontrarse a gusto con las herramientas que usa en Internet y sin duda alguna el correo electrónico es una de las más empleadas.

• Es gratuito: si bien es cierto que hay una versión de pago que incluye algunas características adicionales, la gran mayoría de los usuarios no suele necesitar esos extra. Un claro ejemplo de lo completo que es este correo electrónico y del uso que le podemos dar. Es más, son muchas las personas que también utilizan Hotmail como su correo de uso profesional.

• Una opción 100 % segura: por último, no podíamos olvidarnos de una característica que es fundamental en Internet como es la seguridad. Sobre todo si tenemos en cuenta que una cuenta de correo electrónico es un lugar donde podemos intercambiar información y datos personales que no queramos que lea cualquiera.

Los primeros pasos con Hotmail: cómo crear una cuenta de correo

Finalmente, no podíamos dejar de hablar brevemente de cuáles son los pasos que tenemos que dar para crear una cuenta de correo electrónico con Hotmail.

Como ya hemos comentado, la facilidad de uso es una de las características por las que destaca Hotmail. Una característica que también vemos a la hora de crear nuestra cuenta.

De esta manera, tan solo será necesario que elijamos un nombre para nuestra dirección de correo (lo más recomendable es que sea fácil de recordar y de pronunciar para evitar problemas cuando compartamos nuestra dirección con familiares, amigos y conocidos) y una contraseña lo suficientemente segura (es decir, que incluya mayúsculas, minúsculas y caracteres alfanuméricos) y ya podremos comenzar a disfrutar de todo lo que tiene que ofrecernos Hotmail.

Para terminar, también cabe mencionar que durante el proceso de creación de nuestra cuenta, podremos añadir información de seguridad complementaria, como otra dirección de correo electrónico o bien nuestro número de teléfono.