En la web de Lidl, y muchas veces en sus bandejas de carne, nos dicen que sus productos cárnicos tienen una certificación de bienestar animal, algo que las investigaciones de Equalia han demostrado que no es cierto, al menos en el caso del pollo.
Equalia es una organización no lucrativa que se dedica a mejorar las condiciones de vida de los animales de granja que se destinan al consumo, intentando que se firmen acuerdos que afecten de manera positiva a los animales, que es lo que está tratando de hacer ahora con Lidl.
Investigaciones en dos macrogranjas de Sevilla y Tarragona
La organización, que trabaja en defensa de los derechos de los animales, ha llevado a cabo dos investigaciones en diferentes macrogranjas de producción de carne de pollo, una en Tarragona y otra en Sevilla.
Esta semana ha publicado el reportaje de investigación con los datos que obtuvieron en esas dos granjas, viéndose que se estaban cometiendo irregularidades graves en materia de bienestar animal.
Tanto es así que esta organización ha denunciado a la granja y a la empresa proveedora de este supermercado alemán por un presunto delito de maltrato animal y por otro presunto delito contra la salud pública.
Por parte de Lidl, la respuesta no se ha hecho esperar y habla de una condena de los abusos y el maltrato animal, rompiendo relaciones con las granjas investigadas, lo cual no es suficiente para Equalia, cuyo deseo es que el gigante alemán vaya un poco más allá.
El Compromiso Europeo del Pollo
El trabajo que está llevando a cabo Equalia está destinado a que los grandes supermercados se unan al Compromiso Europeo del Pollo (ECC en sus siglas en inglés). Lidl es el único de los hipermercados de nuestro país que aún no se ha adherido a la iniciativa, aunque sí que lo ha hecho en Francia.
Este compromiso consiste en implementar medidas nuevas en el sector avícola, donde se han unido ya más de 300 empresas de toda Europa, las cuales se han comprometido a cambiar las razas que usan para luego vendernos la carne en los supermercados.
Ahora mismo se emplean linajes de crecimiento rápido, como el broiler, y la idea es ir abandonando esta raza y las que son similares a ella, cambiándolas por otras de crecimiento más lento y natural.
No solo ayudaría a que los animales estuviesen mejor en las granjas, sino también a nosotros como consumidores, pues tendríamos acceso a una carne de más calidad y, sobre todo, mucho más sana que la que hay en este momento en los lineales de los supermercados.
Debemos recordar que la denuncia de Equalia contra las dos granjas que proveen a Lidl no solo es por el maltrato a las aves, sino también por delitos que afectan a la salud pública, lo que significa que han visto algo que puede llevarnos a enfermar si consumimos esa carne. Lidl no quiere saber nada del ECC aquí en España, todo ello a pesar de las investigaciones publicadas por Equalia.