El Alto Tribunal ha decidido no abrir una causa penal contra Juan Carlos I pese a la querella presentada por varios juristas
El Tribunal Supremo ha cerrado filas en torno al rey emérito Juan Carlos I y ha decidido no abrir una causa penal por la gestión opaca de su fortuna, ignorando la querella presentada por un grupo de juristas entre los que se encuentran fiscales y magistrados jubilados del propio Supremo. El alto tribunal ha optado por pasar página y no revisar el archivo previo de la Fiscalía, pese a las irregularidades señaladas por los denunciantes y a los cuestionamientos sobre la validez de la regularización fiscal del monarca.