A continuación te frecemos algunos consejos que te serán muy útiles para esa nueva etapa de tu vida.
Explorar exhaustivamente la zona
Si ya tienes en mente el lugar que has escogido para vivir, bien sea un terreno en el cual vas a construir tu casa o si ya la casa existe, es conveniente estudiar un poco la zona.
Indaga en cuanto a los servicios médicos, de transporte, de internet y algún otro que te interese. Si tienes niños en edad escolar, averigua sobre colegios, facilidades de transporte y actividades para ellos.
Por otra parte, también sería conveniente averiguar sobre posibilidades de cultivos en la zona, cuáles son los animales que puedes encontrar y cuáles pueden ser dañinos. Es importante estar bien informado sobre el entorno en el cual vamos a vivir.
Establecer un período de adaptación
Es probable que vengas de una gran ciudad, en donde el ritmo de vida es más acelerado, donde todo se mueve muy rápido, y siempre andas con prisas. En el campo todo suele ser más pausado, más tranquilo, así que deberás acostumbrarte a ese cambio.
Quizás tanto silencio en la noche se te haga extraño y te cueste un poco acostumbrarte, pero en general son más los beneficios que obtendrás, ya que el sueño será más placentero y reparador.
Una opción para este período de adaptación es visitar la ciudad cada cierto tiempo, y así verás que poco a poco querrás quedarte más tiempo en tu nueva casa rodeada de tanta tranquilidad y sosiego.
Considerar los beneficios que ofrece la vida en el campo
En líneas generales podemos decir que ofrece sobre todo tranquilidad, ya que los niveles de estrés seguramente bajarán al vivir sin la prisa que impone la ciudad.
Por otra parte, no tendrás que invertir largas horas en un atasco de tráfico para trasladarte a tu trabajo. Además, la alimentación suele ser mucho más sana porque tendrás más acceso a frutas, legumbres y vegetales producidos por ti mismo o por personas de la zona, que seguramente no utilizan productos químicos en su cultivo; esto permite que estos productos sean más sanos.
En cuanto al aire que respiras en el campo, por supuesto que es más limpio y sin la contaminación propia de la ciudad por la cantidad de automóviles y, en general, por la densidad poblacional. Tus hijos crecerán en un ambiente más sano y seguro.
Combinar algunas comodidades de la ciudad en tu vida en el campo
En la actualidad vivir en el campo no significa aislarse. Puedes seguir contar con herramientas como internet, que te mantienen conectado y al día.
Igualmente puedes contar con préstamos con bajo interés que te permitirán adaptar tu nuevo hogar a tus exigencias y comodidades, así que si te gusta vivir en contacto con la naturaleza y te puedes adaptar a la falta de lo que tenías en la ciudad, seguramente vivirás tranquilo en el campo.
